Las empresas españolas esperan un fuerte crecimiento de las ventas en el segundo trimestre, tras sufrir un estancamiento entre enero y marzo, según la última encuesta del Banco de España sobre actividad empresarial, conocida como EBAE.
Este sondeo desvela la expectativa en el próximo de trimestre del mayor incremento de la facturación desde el primer trimestre de 2022. Un fuerte crecimiento que coincide con la previsión del menor aumento de los costes (energía, materias primas, salarios…) de toda la crisis de inflación.
La encuesta recoge una muestra de 5.707 empresas y se realizó entre el 13 y el 27 de febrero. Por lo tanto, no incluye el impacto de las turbulencias financieras tras la caída del Silico Valley Bank en Estados Unidos y el rescate pedido por el banco suizo Credit Suisse.
Además, el Banco de España explica que “tras el fuerte repunte de la inflación desde el año pasado, las respuestas de las empresas sobre la variación de la facturación se verían más condicionadas por las variaciones de precios, lo que dificulta la valoración de la evolución de la actividad empresarial en términos reales”.
Teniendo en cuenta estas aclaraciones, es relevante la moderación del incremento de los costes de las empresas, mientras que se mantiene el ritmo de crecimiento de los precios de venta.
En relación con la evolución de los costes de los consumos intermedios, los resultados de la encuesta sugieren una cierta moderación adicional de las presiones inflacionistas en este trimestre, que, no obstante, seguirían siendo elevadas”, resumen Alejandro Fernández y Mario Izquierdo, economistas del Banco de España.
“Cuando se pregunta a las empresas por sus perspectivas a un año vista, los resultados apuntan en la misma dirección: los encuestados esperan que la presión de costes siga siendo elevada, pero algo menor que la prevista hace tres meses para el mismo horizonte temporal”, continúan.
Las contestaciones de las empresas se resumen en un índice que pondera sus valoraciones cualitativas formuladas en una escala de cinco niveles, comprendidos entre el “descenso significativo” y el “aumento significativo”, de modo que, en los dos casos extremos en los que todos los encuestados recurrieran o bien a la primera o bien a la segunda de estas dos respuestas, el índice tomaría un valor de –2 y de 2, respectivamente.
(Fuente: elDiario.es)